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La diabetes mellitus es una enfermedad metabólica crónica, condicionada hereditariamente, que sin ser tratada, puede llegar a ser mortal. Las células del cuerpo ya no absorben moléculas de glucosa (carbonos de hidrato). Esto puede tener dos razones: porque falta la hormona insulina o porque las células ya no reaccionan a la insulina. Este defecto desordena todo el metabolismo. Uno de los síntomas principales es que el enfermo debe orinar con frecuencia.
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Como las células no absorben azúcar, el nivel de azúcar en la sangre sube. Los riñones finalmente expulsan el azúcar junto a la orina. Para disolver el azúcar, el cuerpo necesita mucho más agua que de costumbre. Así el enfermo sufre de fuerte sed. Este es otro síntoma de esta enfermedad. Según el tipo de diabetes aparecen distintos síntomas en diferente fuerza y notoriedad:
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- agotamiento, cansancio y dolores de cabeza
- piel irritada por picazón
- hambre insaciable
- Calambres en las pantorillas, manos y pies dormidos
- Empeoramiento de la capacidad visual
- - Pérdida de peso. El enfermo pesa menos, porque orina tanto...
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